
Se pregunta Kobi Yamada, autor de ¿Qué haces con una idea?, qué sucedería en el mundo si los millones de niños que lo habitan creyeran en sus ideas y colaboraran con las de los otros. Seguramente de esa pregunta de un hombre creativo e inquieto, nace la idea de este libro que es un canto a la auto confianza y la libertad de apostar por aquello en lo que creemos.
El libro fue publicado en EEUU por Compendium Inc., la empresa que el mismo Kobi dirige, y en español por la editorial catalana Birabiro.
El niño protagonista de la historia, al principio, no sabe qué hacer con su idea y mucho menos cómo presentársela a los demás por miedo a lo que dirán. Y no se equivocaba porque muchos la derribaron por rara y le dijeron que era una pérdida de tiempo. Se desmotivó, pero con el correr de los días se dio cuenta de que se sentía mejor con su idea y apostó por ella. La idea creció y él creció con la idea que, por ejemplo, le enseñó a caminar cabeza abajo para que pudiera ver las cosas desde otro ángulo.
Durante casi todo el libro, las ilustraciones a lápiz de Mae Besom se mantienen en tonos blancos y grises, excepto la idea que es de un amarillo radiante. Cuando al fin la idea se hace realidad, la página se llena de color y luminosidad porque ya no le pertenece solo a él.
Yo, como el protagonista de esta historia, tuve una idea de niña: quería ser escritora. Muchos a mi alrededor creyeron que tenía la cabeza llena de pájaros, pero yo también sabía que era mucho más feliz con mi idea y todavía lo sigo siendo. Porque con ideas puedes cambiar el mundo y si no, al menos, seguro que mejoras el tuyo.
P. D. Dicen que se viene un film de esta historia. Lo esperaremos, como decimos en catalán, “amb candeletes”.