
Un grupo de ratoncitos decide salir de viaje y, como cualquiera de nosotros cuando llega tan ansiado momento, preparan todos sus atuendos y emprenden el camino a la playa.
Como todas las vacaciones, tienen sus más y sus menos: momentos de disfrute y algún que otro imprevisto, pero que en equipo sabrán resolver.
La musicalidad del texto hace disfrutar a pequeños y grandes, no solo por sus ágiles rimas, sino también porque cada estrofa enlaza con la posterior repitiendo la última palabra, de modo que la lectura se convierte en un juego.
El colorido y la frescura de las ilustraciones, los paisajes veraniegos, el detalle de cada uno de los objetos que podemos reconocer como propios y, sobre todo, esos ratoncitos con un look medio punk y sus hocicos respingones son la guinda de la torta.
La edición es de la gran Kalandraka, con texto de Xosé Manuel González “Oli” e ilustraciones de la argentina Natalia Colombo, que nunca nos defrauda.
Un libro delicioso para soñar con la llegada del verano y plácidos momentos de lectura.