Tomi Ungerer, escritor e ilustrador francés que ya cuenta con nada menos que 85 años, es más conocido por historias como “Los Mellops” o “Los tres bandidos”. Sus obras (texto e ilustración) se caracterizan por la sátira y la crítica social, y eso lo podemos comprobar claramente en “Flix”, una obra con casi 30 años pero actual como si la hubiera escrito ayer.
Flix es un perro, hijo de una pareja de gatos. Su familia lo educa como gato, pero sus genes a veces lo obligan a ser perro, de modo que Flix crece con una identidad dividida que no le permite adaptarse al mundo y, por eso, no tiene amigos. Hasta que un día, un par de accidentes le permitirán mostrar que hay que valorar a los seres por lo que son y al fin consigue ser aceptado por todos, gatos y perros.
Al texto no le falta ni le sobra nada, pero las ilustraciones son de una riqueza exquisita. En ellas encontramos minorías de gatos árabes y perros chinos, ratones maltratados, un monumento a la perra más internacional, Lassie, y la escultura al perro más católico, el San Bernardo.
Una invitación a la risa con muchos mensajes subliminales que, al menos a los adultos, nos darán para pensar.